Insultas a mi nación, me insultas a mí

Durante la final de la Copa del Rey que disputaron el Barcelona y el Valencia en el Buesa Arena de Vitoria, repito, la Copa de S.M el Rey de España, se le pitó a el rey y al himno español, algo habitual en los últimos años.

La gran pitada que sufrió el himno español y el rey a su entrada al pabellón fue en Vitoria, en el País Vasco, y la mitad de las 15.000 personas asistentes eran de allí y no decir ya de los aficionados del Barcelona.

            

Este momento lo recordarán por los pitos en la final de la Copa del Rey de 2009 de fútbol que jugaron el Barcelona y el Athletic en Mestalla, Valencia. Esto ya fue premeditado por las plataformas 'Catalunya Acció' y 'Èsait'. Aunque se iba a sancionar no fue así por la libertad de expresión. 

                                 

En 2012 se volvieron a encontrar también en la final de la Copa en la despedida de Pep Guardiola y la pitada fue incluso mayor, además que Esperanza Aguirre ya había pedido que si se pitaba se suspendiera el partido, pero tampoco fue así.

Por lo visto esto no va a parar. Yo soy una persona que como primer lema tiene la palabra RESPETO, y sí, en mayúsculas. Yo respeto el deseo independentista de algunos, pero no tolero que se le pite a mi nación, porque entonces se me pita a mí.

¿Libertad de expresión? Claro, pero siempre desde el respeto. Una ley muy justa es sancionar los insultos, por ejemplo los racistas. Vale, entonces, se sanciona insultar a un extranjero. Muy bien, me parece muy bien. Pregunto ¿Por que me tienen que insultar personas de mi mismo país que se sientan extranjeros? ¿No es lo mismo? ¿No se puede sancionar?

Pues yo quiero que esto cambie. Yo quiero que nos respetemos. Y que lo contrario se sancione. En mi humilde opinión se debería haber suspendido el partido. Pero en esta vida actual perder dinero por dignidad no cuadra.

Si no quieren jugar la Copa del Rey porque es ESPAÑOLA, que no la jueguen, pero si la juegan debe ser bajo el respeto. 

Así que no quiero ser pesado, pero reitero mi deseo del RESPETO de los unos a los otros y la sanción a quienes no lo cumplan.